Privilegios a los que luchan
Querida mamá (el último post tuvo poca lectura, creo que fuiste tu):
Yo no había querido reclamar por el pan, un poco seco, que nos dan de almuerzo cuando estamos sesionando, pero ahora me dio rabia porque dicen que “la mesa” Loncon-Bassa ha gastado casi 1 millón y medio de pesos en sus almuerzos con hasta 10 invitados al día. Por cierto, nunca he estado en esa categoría y dudo que así sea.
No había comentado nada porque entiendo que todos los trabajadores de Chile – salvo valorables excepciones – salen a almorzar o llevan su almuerzo desde la casa. Que te den almuerzo es un beneficio – aunque no sea el más rico del mundo –, un privilegio como le gusta decir a algunos.
Pero además tenemos un coffee break que cuesta más de 2 millones de pesos diarios. Se agradece, pero eso también es un beneficio. De hecho en los organismos públicos suele suceder que se hace una vaca para comprar una cafetera y el café. Entiendo que somos servidores públicos, representantes de nuestros electores, que nos han elegido para eso, no para arreglarnos los bigotes con sus impuestos.
No me quiero quejar, pero me da rabia que no solo el almuerzo de la mesa sea mejor sino que además Jaime Bassa haya pedido una van para su traslado. ¿Aprobada por quién? ¿Informada dónde?
Yo no digo que no se pueda, pero me parece importante que alguien, que no sean ellos mismos, definan en qué se gasta, por qué es clave para el funcionamiento de la Convención, por qué es prioridad, etc.
Porque además anda el rumor de que a la machi Francisca Linconao se le autorizó el arriendo de un departamento estilo Airbnb. Lo que no creo que sea cierto. Una cosa es que se le autorice hablar en un idioma que no entendemos (aunque sabe hablar castellano) y que todos tengamos que pagar el traductor (que además se toma todo el tiempo necesario para traducir en forma adecuada), pero además alojamiento especial para ella y acompañante, suena a exceso. No debe ser verdad. La mesa no autorizaría algo así, creo yo.
Por otra parte, en lo administrativo, todos esos recursos (además de los test de antígenos y pcr gratis para todos) deberían salir de las asignaciones personales de cada uno ¿o no? Yo entendía que eran para eso.
Ya que no queremos que se nos peguen las malas prácticas del Congreso, deberíamos partir por estas cosas. Esta semana la comencé con enojo. Si la ciudadanía supiera, estaría furia.
Gracias mamá por leerme todos los días. Gracias si alguien más está leyendo hoy. En ese caso, te invito a reenviar este blog, para que crezca la comunidad.
Horus Vidar, convencional en furia
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