Sesión Inaugural: Elisa Loncón y Jaime Bassa
Queridos amigos:
Fue un día largo, largo. A las 8.30 se abrieron las puertas del patio del Ex Congreso Nacional en Santiago, en que se había habilitado una carpa para reunirnos los 155, sin problemas de aforo, con las distancias correspondientes. Estábamos citados a las 10, así que fuimos llegando de a poco, dejando nuestras cosas en los puestos, presentándonos unos a otros. Dicen que algunos venían acompañando a las marchas. Adentro estaba todo tranquilo.
A las 10 todavía no habían llegado todos. Carmen Gloria Valladares, representante del Tricel a cargo de la ceremonia, decidió comenzar, pero parte de la Lista del Pueblo no la dejó porque familiares y amigos de algunos convencionales estaban siendo reprimidos por Carabineros - según señalaban -. Mientras se escuchaban gritos con esa información, se acercaban a la testera y golpeando la mesa, exigiendo a la relatora no comenzar mientras esa situación se resolviera. Al mismo tiempo, se escuchaba: "No a la represión! No a la represión!" y "Liberar, liberar, a los presos por luchar".
Valladares decidió suspender lo que no había comenzado para averiguar qué estaba pasando. A los 10 minutos, vuelve a la testara anunciando que no había detenidos y comienza el himno nacional. Algunos de los presentes cantaron respetuosamente. Chile Vamos completo lo cantó como si se les fuera la vida en eso, y muchos más de los imaginables pifiaron sin parar y repitieron consignas contra la represión y por la liberación de los llamados presos políticos de la revuelta y de la Araucanía. Incluso, Agustín Squella y Patricio Fernández fueron increpados... por cantar el himno.
No se me ocurrió nunca que en nuestro propio país, en una ceremonia oficial, podía ser "mal visto" cantar la canción nacional. Tampoco que no se iba a respetar a los jóvenes de la orquesta juvenil. La verdad es que fueron muy profesionales y su interpretación fue perfecta y estoica. Sin embargo, cuando ya habían terminado, se les vio compungidos, una de ellas siendo consolada. Al fin y al cabo, para ellos también debe ser violento presenciar cómo se pasa a llevar el himno que les enseñaron a respetar y que interpretan con orgullo.
...
Carmen Gloria comienza a leer la sentencia de proclamación, pero es interrumpida nuevamente y anuncia que retomaremos la sesión a las 12, para que la aceptación de los cargos fuera en forma "ordenada y en paz".
A las 12.36 vuelve la relatora y nos informa que "no hay detenidos" (supimos después que hubo desordenes, piedrazos y autos de convencionales dañados) y pide una aceptación general del cargo para el que fuimos elegidos. Todos juntos al unísono, lo que se agradece profundamente, porque después de ver algunas declaraciones de aceptación del cargo de alcaldes y concejales (con amplias proclamas), podría haber durado varios días.
Entre las 13 y las 19 horas elegimos presidenta y vicepresidente de la Convención. Elisa Loncón y Jaime Bassa, ambos apoyados mayoritariamente por los pueblos originarios, Partido Comunista y el Frente Amplio, en primera vuelta. En segundas y terceras, por los Independientes No Neutrales, independientes y algunos descolgados de la Lista del Pueblo, si mal no recuerdo. En general, Chile Vamos se cuadró casi totalmente con Harry Jürgensen y Pollyana Rivera como presidente y vicepresidenta respectivamente. Más bien testimonial, pero demostrando orden y unidad.
Terminadas las votaciones (en cada una de las cuales se nos llamó de a uno a votar y luego se leyó a viva voz cada voto y quien lo emitía), escuchamos las palabras de la presidenta y vicepresidente. Lo raro es que el presidente hablaba en femenino: "nosotras,", "todas" y otras formas que nunca había escuchado en un hombre. En esa particular forma, nos señaló que mañana lunes analizaremos como Convención que pasará con la libertad de los "presos de la revuelta" (lo que me parece muy extraño porque esa es una atribución de los Tribunales de Justicia y no de la Convención), que sesionaremos a las 15 horas (luego martes, miércoles y jueves de 10 a 17 horas) y se pidió un minuto de silencio por las víctimas de la violencia.
Un par de convencionales de la Lista del Pueblo y de los escaños reservados tenían colgadas fotos de quienes ellos consideran presos políticos, pero antes de que empezara el minuto de silencio, la gran mayoría de los convencionales de Vamos por Chile mostraron fotos de las víctimas de la delincuencia, del terrorismo en la Araucanía, de los Luchsinger Mackay, de Carabineros fallecidos, etc. La cara de impresión de los convencionales de izquierda era de no creerlo. Me dio la sensación de que Chile Vamos se tomó y dio vuelta el minuto de silencio.
Finalmente, un grupo de feministas (todas con pañuelos verdes/morados, que entiendo es #abortolibre y #niunamenos) presentaron a la mesa su propuesta de reglamento feminista, mientras cantaban algo del fin del patriarcado. Chile Vamos también entregó una propuesta de reglamento. Me gustaría ver eso del reglamento feminista porque me cuesta asignarle perspectiva de género a los instrumentos de trabajo. Me parecía que el reglamento debía asegurar respeto de las mayorías y minorías y que avancemos en lo que se nos mandató: escribir una propuesta de Constitución.
Ya veremos cómo sigue mañana. Buenas noches.
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